Existen condiciones mínimas que debe alcanzar una pelota en juego para poder efectuar un tiro de ataque. Si su adversario es Saúl Bianchi y ud. le devolvió una pelota que alcanzó estas condiciones, ya puede ir pensando en el siguente punto, éste ya lo perdió! Muy pocas veces falla y se desconcentra. Si el oponente no aprovecha estos momentos para posicionarse en el juego, es difícil remontarle el tanteador. Qué actitud y qué temperamento! Es un gladiador.
Y es en este punto donde quiero referirme a Saúl sobre la otra faceta deportiva: su comportamiento, porque es allí donde uno alcanza a valorar mejor a este jugador. Saúl es un jugador leal, humilde y solidario. Hay jugadores que en la derrota buscan escusas. Saúl habla de sus fallas al terminar vencido y reconoce los atributos del adversario. Hay jugadores que en la victoria se han convencido de que ya están "de vuelta". Saúl quiere dar el siguiente paso para mejorar, honra a sus adversarios, recibe con humildad los saludos del triunfo y comparte su logro. Es un digno campeón. Cuando Saúl gana, muchos sentimos que ganamos.
Señores...jugó...Saúl Bianchi.